La escritura es refugio seguro, ala cálida de cisne; y escribir la madriguera que arrastro conmigo. Cuando la situación me produce pánico o lo presentable me resulta impresentable, pienso que siempre puedo sacar de la manga el cuaderno y refugiarme en el otro mundo. Allí estoy bien y nadie dice nada, simplemente porque ese nadie ni siquiera existe.
domingo, 24 de julio de 2011
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4 comentarios:
¡Qué sería de nosotros sin esas ocasiones en las que nos abres las puertas de tu refugio y nos invitas a perdernos entre las letras que lo decoran!
¡Hagamos una fiesta de letras!
¡Hecho! Yo llevo las pes y las íes.
piiiiiiiiiiiiii, piiiiiiiiiiiii.
¿hay que traer tíldes y signos de puntuación?
¡Bien! Yo las uves y las as: ¡Vaaaaa! ¡Vaaaa!
Hay que llevar de todo, sin olvidarnos los signos de exclamac¡¡¡¡¡¡ón
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